Desde mi punto de vista (y después de leer varias publicaciones de Albert V. Carron y W. Neil Widmeyer), me declaro totalmente de acuerdo con ellos, y creo que la diferencia entre ambas definiciones radica en la tendencia que tiene un equipo a permanecer unido en el tiempo, es decir, a cohesionarse.
Lo complicado viene cuando, durante las fases que llevan a la formación del equipo como tal, aparecen factores, atascos o barreras que detienen la evolución del equipo. Desde mi punto de vista, identificarlos y tratar de resolverlos a tiempo, es la única forma de consolidar tu equipo.
Atentos miembros de equipos, coordinadores, mandos intermedios, emprendedores y todos aquellas personas que quieran formar parte de, lo que los freaks del coaching han tenido a bien llamar, Equipo de alto nivel.
Aquí os dejo las principales barreras, a mi parecer, que encuentran los equipos durante su formación:
* Incompatibilidad de personalidades – No estamos jugando a lo mismo y eso, a la larga, se nota, y mucho.
* Conflictos entre papeles sociales y tareas dentro del grupo – Muy común cuando nuestro líder no tiene el carisma y mano izquierda suficiente.
* Ruptura de la comunicación – O, por otra parte, desarrollo descontrolado de canales informales de comunicación.
* Luchas de poder – Aquí se debate el tema de lider circunstancial o absoluto… todavía hay gente que no lo entiende.
* Alta rotación y movilidad – Relacionado con la satisfacción personal de los miembros del equipo.
Si habéis identificado alguna de estas situaciones en vuestro equipo (normalmente se producen 2 o 3 a la vez!!), tenemos que empezar a poner remedio!! A por ellos!!
Emilio Solís
Consultor Formación
www.gottraining.es